Como bien sabemos, el perro es el mejor amigo del hombre, y en nuestros hogares es un miembro más de la familia. Es por ello, que con la llegada de un nuevo cachorrito, hay muchos dueños que se preguntan cómo proceder en los primeros meses y cómo ayudarles a corregir ciertos aspectos de su comportamiento.

Tener un perro en casa siempre es un bien, y aunque dan ruido con sus ganas de juguetear (más cuando son apenas unos cachorritos) su amor incondicional y su cariño prevalece sobre lo demás. Es por eso que un buen cuidado y un buen trato para nuestro amigo peludo siempre será un acto de unión estrecha entre los dos. ¡Te enseñamos algunas pautas para adiestrar a un cachorro.

Adiestrar a un cachorro, una tarea difícil pero no imposible.

Los amantes de los perros sabemos las cosas buenas que pueden hacer con sus mascotas como darles amor, comida y refugio. Hay otras cosas que debemos de evitar para que su comportamiento sea cada vez mejor:

 

  • Dejarlos solos en el automóvil.

No debemos dejar a nuestro perro nunca en nuestro coche encerrado aunque sea un momento. Nuestra mascota puede pensar que lo estamos dejando abandonado y ocasionar graves problemas como puede ser estrés, nerviosismo o, si no está correctamente ventilado, provocar asfixia.

Recordemos, dejarlos solos en casa es una cosa: es su territorio y se sienten cómodos y seguros, pero el coche no es su zona de confort y puede ocasionar problemas. ¡Evita dejarlo solo!

 

  • Compartir nuestra comida con ellos… ¡Un error!

Una pezuña en tu pierna, dos saltitos y sus caras de pena y… ¡les damos cualquier cosa! Esto no debe ser así, por dos cuestiones: su comportamiento y su bienestar físico. Para adiestrar a un cachorro la disciplina en la comida es esencial.

Si les acostumbramos a dar comida cuando estamos en la mesa, hará que cada vez que nos vean comer estén detrás nuestra y rechacen el pienso, destinado para ellos, porque la comida humana les resulta más golosa. ¡Hay que ser fuerte ante sus intentos!

Además, las comidas que nosotros ingerimos no se deben dar a los animales aunque nos sobre o tan solo se trate de simples huesos de carne. Están cocinadas con alimentos que puede que a los perros no les sienta bien en su estómago ocasionando vómitos o diarreas.

 

  • Las órdenes siempre con palabras… El contacto físico solo para dar amor.

Nuestras mascotas tienen que aprender a obedecernos al escuchar una orden. Es por ello, que se aconseja repetirlas en voz alta y severa, para que, con el tiempo, vayan aprendiendo lo que pueden y no pueden hacer. Pero ante todo… ¡Mucha paciencia! Evitemos el contacto físico con el animal para otra cosa que no sea premiarlo con un achuchón por sus buenas acciones. ¡Recuerda esta pauta siempre! Todo el amor que les des te lo devolverán por 100.

 

  • Gritar no les hará ser disciplinados

Intenta evitar por todos los medios gritarle a tu perro, ellos no entienden mejor por hablar más alto. Al contrario, la disciplina se les debe inculcar por medio de órdenes cortas, claras y con voz fuerte, pero nunca con gritos, ya que pueden ocasionarles confusión y estrés.

 

  • Llévalos al veterinario.

Si ves algún signo de tristeza, apatía, falta de hambre o irregularidades cuando hacen sus deposiciones, debes llevarlo al veterinario y nunca darle los medicamentos que creamos oportunos. También se debe visitar al menos una vez al año para asegurarnos de que todo va bien (vacunación, revisión de dientes, tratamiento contra parásitos, etc.)

 

¿Qué otras cosas debemos evitar o controlar cuando se quedan solos o cuando estamos en casa?

 

A la hora de adoptar o acoger a un perro, debemos educarlos de una forma correcta, haciéndoles saber en el sitio en el que se encuentran y adaptarlos a nuestras condiciones.

 

  • Comportamiento de sus ladridos.

Nuestra mascota deberá de aprender con nuestra ayuda a que no se debe de ladrar en la madrugada o cuando se quedan solos. Además, enseñarles que cuando una persona llegue a casa de visita, no se produce ninguna invasión de territorio, sino que se haga en un entorno de confianza, para que el animal no se vea atacado. 

 

  • Comodidades en el hogar. 

Debemos de adaptarlo a nuestra casa, dándole su propio espacio, con una camita donde pueda dormir y descansar, un lugar donde encontrar su pienso y agua, y una zona con sus juguetes y objetos. Así ellos sentirán que están cómodos, seguros y que tienen su propia zona.

 

  • Hacer sus necesidades fuera de casa.

Desde que son pequeños, tenemos que enseñarles a salir a unas ciertas horas para que ellos puedan crear una rutina y salir a despejarse y hacer sus necesidades. Así, nuestra mascota sabrá cual es el plan de cada día y no tendrán que hacer nada dentro de casa. 

 

¿Te han servido estas pautas? Esperamos que sí. Si vas a salir fuera y no tienes con quien dejar a tu nueva mascota, recuerda: Residencia Oasis está aquí para ti.