Desconfinamiento con mascotas en la familia

Nuestras mascotas también han sufrido un importante cambio en sus rutinas durante los más de 50 días de confinamiento a causa del coronavirus. El cambio de rutinas ha afectado a los horarios, paseos, relaciones con otros animales o gozar de algunas horas de intimidad.

Una vez iniciada la desescalada con algo más de movilidad es un buen momento para tener en cuenta consejos de los veterinarios para un correcto desconfinamiento de las mascotas.

“Volver a la normalidad” puede tener efectos negativos sobre nuestras mascotas, sobre todo en el caso de los perros. Hay que pensar que ellos pasarán de estar todo el día acompañados a la soledad cuando salimos. Los perros son animales sociales, y pueden sufrir problemas de ansiedades, miedos o frustración.

 

Consejos para un desconfinamiento sin traumas.

Nuestros perros pueden desarrollar actitudes que antes del confinamiento eran poco habituales como llorar, ladrar, romper mobiliario e inlcuso hacer sus necesidades en casa, todo ello como consecuencia de perder el contacto casi continuo que han tenido con los humanos durante el confinamiento. Para evitarlo, recomendamos ir dejando a los animales solos a ratos, para ir a hacer la compra, por ejemplo, o dejarlos solos en otra habitación de la casa, intentando siempre que no lo asocien a un castigo para evitar complicaciones mayores. Suele dar buenos resultados dejarles su juguete preferido o algo de comida en esa habitación.

Es fundamental ir dejándolos solos de forma progresiva. En caso de detectar comportamientos negativos, es recomendable consultar a los veterinarios y educadores cuanto antes, para evitar complicaciones.

La cosa será mucho más sencilla con los gatos, conejos, hurones y reptiles porque volverán a recuperar la privacidad que habían perdido al verse obligados a convivir 24 horas con sus dueños. Para este tipo de animales más independientes la desescalada puede ser incluso un alivio porque podrán retomar algunos de su hábitos.

Trucos para aliviar la tensión con mascotas en la desescalada

Siempre tenemos la posibilidad de realizar algunas rutinas para hacer más llevadero el desconfinamiento a nuestras mascotas. Es importante mantener las rutinas de salidas, juegos y comidas en la medida de lo posible e intentar llenar el tiempo que estemos fuera con algo que estimule a nuestra mascota y le haga llevadera la separación.

No debemos olvidar la importancia de respetar sus horas de descanso, que no son las mismas que las de una persona, «sobre todo en el caso de que haya niños en casa» para evitarles un mayor estrés. Además, para que sufran lo mínimo posible los cambios de rutina, deberíamos mantener su actividad física en la medida de lo posible. Para los perros, es importante entender que han de salir de pasear, se tenga o no jardín, pues es necesario para ellos airearse, oler y relacionarse con el entorno. En el confinamiento han estado saliendo y si ahora nos olvidamos de sus salidas por falta de tiempo no será bien recibido.

Es más que probable que la vuelta a la normalidad no sea bien recibida por nuestros amiguitos peludos, pero hay que evitar los castigos en casos de mal comportamiento porque solo consiguen estresar más al animal, cosa que afectará negativamente al vínculo entre él y su dueño a causa del miedo.

¿Castigar o premiar?

Siempre hemos pensado que es más interesante premiar las conductas positivas, pero es cierto que a veces el castigo puede ser eficaz si se realiza de la manera correcta. Debe ser contundente, pero nunca físico, de hecho está contraindicado. El castigo puede ser solo un tono de voz contundente y debe llevarse a cabo en el momento justo, cuando ocurre lo que no queremos que haga nuestra mascota.  A continuación, cuando el animal deje de hacer eso que no queremos que haga, hay que premiarle para que entienda que ha actuado correctamente al dejar de hacerlo.

¿Podemos hacer algo para aliviar el estrés de nuestras mascotas?

Para evitar el estrés siempre viene bien jugar con los animales, marcando bien el inicio y el fin del juego para que entienda que después no debe venir a seguir jugando. Te vendrá bien usar juguetes con comida para que vaya relajándose solo tras la excitación producida por el juego.

Los gatos deberían tener acceso a zonas elevadas como plataformas o estanterías para ofrecerles más espacio y ofrecerles su ansiada privacidad, esa que han perdido con nuestro confinamiento. Siempre viene bien jugar con ellos y deberíamos proporcionarles sitios donde esconderse para que puedan reducir el estrés que les ocasiona el exceso de compañía.

Esperamos que estos sencillos consejos resulten útiles a nuestros amiguitos de cuatro patas y a sus familias. ¡Estamos deseando volver a tener nuestras piscinas llenas de patas y hocicos! Os esperamos con los brazos abiertos.