Se acercan meses en los que muchos hogares aumentan su familia con cachorros, a veces destetados y otras veces huérfanos, en este segundo caso se complica bastante la tarea, pero nada es imposible.

Desde su nacimiento los cachorros deben estar en un lugar tranquilo y apartado, el lugar que escojas debe estar libre de corrientes de aire y si es posible que duerman en una cama para perros con su mamá evitando el frío del suelo, puedes ponerlos en una caja de cartón con muchas sabanas o toallas viejas. Es idóneo que el lugar donde permanecerán los cachorros se mantenga limpio, en este artículo te enseñaremos a cuidar cachorros recién nacidos con o sin madre.

Si tienes en casa cachorros con su mamá

Este caso es en el que resulta más sencillo cuidar de los cachorros, ya que las madres suelen hacer casi todo el trabajo duro. En las primeras semanas son totalmente dependientes de la madre pues nacen sordos y ciegos, los cachorros se guían percibiendo el calor de la madre para alimentarse y duermen la mayor parte del día. Aproximadamente a los 15 días abren los ojos, así que partir de la tercera semana ya pueden ver y escuchar y es posible que empiecen a dar sur primeros pasos.

Cuando alcanzan un mes de edad se despierta su curiosidad, son muy juguetones y  empezarán a morder objetos. Ya pueden sostenerse con facilidad así que lo más probable es que sigan a la madre de forma insistente queriendo alimentarse.

Ya están preparados para probar nuevos alimentos, puedes remojar las croquetas preferiblemente con agua y se las das en forma de papilla.

Sepáralos poco a poco de la madre para facilitar el destete, lo puedes hacer colocándolos con ella por las noches y los separas al despertar por la mañana y luego los colocas de nuevo con ella al medio día y  de nuevo por la noche con el fin de evitar que lastimen a la madre con sus dientes. Cuando ya les ha salido toda su dentadura puedes empezar a colocar también croquetas secas para que se acostumbren a este tipo de alimento.

Cuando llegan a casa cachorros que acaban de dejar a su mamá.

Cuando llegas a casa con tu nuevo cachorro, debes tener en cuenta que deja un entorno con su madre y hermanos, donde se siente seguro, para ir a un lugar completamente desconocido.

Como esto puede ser una experiencia traumática para él/ella, debes intentar que la transición sea lo más agradable posible.

En primer lugar, cuando recojas tu cachorro, si puedes, frota con una manta o toalla a la madre y hermanos, para impregnarla con su olor, y se la dejas a su lado para que el olor famiilar le tranquilice.

Una vez en casa, es muy conveniente proporcionarle una cesta o colchoneta que sirva como cama, donde él pueda sentirse cómodo y seguro, y que nunca se debe convertir en un lugar de castigo. Las primeras noches puedes ponerle una bolsa de agua caliente para que esté más a gusto, especialmente si es muy pequeño.

Es fundamental mantener el mismo alimento que tomaba antes de recogerlo al menos durante unos días. Si es necesario un cambio de alimentación, tendrás que hacerlo de una forma gradual para evitar problemas digestivos.

Como lo normal es que los cachorros no puedan salir de casa hasta que tengan administradas todas las vacunas, también es muy adecuado habilitar algún lugar de la casa como aseo del cachorro, donde se pondrá algún material absorbente para pueda hacer sus necesidades. Dan muy buen resultado los cambiadores desechables de bebés, son muy absorbentes e impermeables.

Recuerda que se trata de un cachorro, que está en un lugar completamente nuevo para él y que todo lo que quieras que aprenda llevará su tiempo.

Cuidar cachorros recién nacidos sin madre

Lamentablemente se puede presentar el caso en que los cachorros no tengan a su madre ya sea porque le ocurrió algún accidente, rechazó a los cachorros o sencillamente porque los rescataste sin ella. Si están recién nacidos es difícil pero no imposible ayudarlos.

Cuidar cachorros recién nacidos sin su madre no es una tarea sencilla pero si le brindas todas las atenciones necesarias podrán crecer sanos y fuertes

Si ese es tu caso sigue estos consejos para cuidar cachorros sin madre

  • Colócalos en un lugar limpio y caliente, puedes poner una bolsa con agua tibia a un lado para asemejar el calor de la madre, recuerda que este lugar debe limpiarse continuamente. Si por casualidad estás cuidando un solo cachorro puedes poner un pequeño reloj dentro de su cama con el fin de simular los latidos del corazón de la madre, así el pequeño no se sienta solo.
  • En cuanto a la alimentación debemos decir que la leche materna es el el alimento perfecto para ellos, pero se puede suplir esta necesidad por medio de fórmulas de leche especial para cachorros recién nacidos que venden en las tiendas veterinarias. Debes alimentarlos inicialmente cada 3 horas durante las 24 horas del día por medio de un biberón adecuado, así que prepárate para tener ojeras.
  • Debes estimularlos con un algodón húmedo, preferiblemente con agua tibia para que ellos hagan sus necesidades. Esto lo debes hacer cada vez que alimentes a los cachorros.
  • Cuando empiecen a intentar sostenerse en cuatro patas deberás acariciarlos desde la cabeza hasta la cola simulando los lametones de su madre, esta estimulación puede ayudarlos a que aprendan a caminar con mayor facilidad.

Sigue las recomendaciones anteriores y los cachorros se desarrollarán como si hubiesen tenido a su madre.

Cuidados generales para todos los cachorros:

  • Siempre es recomendable acudir a tu veterinario de confianza con el cachorro recién llegado.
  • El veterinario nos informará de las vacunas y desparasitaciones necesarias según su edad y estado de salud, así como de su alimentación y otros consejos.
  • Nunca olvides que tu cachorro no debe salir a la calle hasta que esté vacunado.
  • Si quieres estar tranquilo lo mejor es que le pongas el chip de seguridad. Es frecuente que los cachorros se despisten jugando, en caso de que se pierda cualquier veterinario podrá localizarte para que pases a recogerlo, pero si no lleva el chip es imposible localizar al dueño.
  • Sé paciente y premia sus logros en vez de castigar lo que está mal. La palabra ¡No! y golpear el suelo con un periódico enrollado cerca de él le hará entender que algo no está bien, recuerda hacerlo de forma suave, no deja de ser un cachorro y solo estás intentando fijar una pauta que podrás usar en su educación futura. Pegarle no soluciona nada ni te sirve para educarle, solo le asusta.
  • A partir de las tres/cuatro semanas de vida puedes y debes empezar a jugar con el cachorro, esta práctica creará unos lazos afectivos que os unirán para siempre.
  • Demuestra tu cariño al cachorro desde el primer momento con gestos suaves, voces calmadas, palabras dulces… No pienses que él no lo siente, las emociones tienen un lenguaje universal.

Esperamos que nuestro artículo te resulte útil, y si crees que podrías añadir algo con tu experiencia te agradeceremos que nos avises, estaremos encantados de añadir tus consejos para que todos los cachorros tenga los mejores cuidados en casa.