Intentaremos con este artículo responder a las dudas planteadas por algunos dueños de perros y gatos con dificultades para administrar la medicación. Vamos a centrarnos en la administración de líquidos y pastillas a perros y gatos.
La forma más sencilla de administrar un líquido o una pastilla es mezclar la dosis indicada, con una cantidad parecida de comida de lata. No conviene poner mucha comida con una dosis muy pequeña de medicación. Algo que suele funcionar para evitar la sospecha de tu amigo de cuatro patas es ofrecerle previamente una pequeña cantidad de comida sin medicación antes de introducir la dosis.
No conviene mezclar la dosis de medicación con toda la comida que se ofrecerá al animal porque si no se la come toda no ingerirá la dosis recetada de medicación.
Problemas que se nos pueden presentar al intentar dar la medicación:
- Animal en ayunas.
- Dosis muy grande de medicación líquida.
- Escupe la comida con la medicación.
A grandes males, grandes remedios. Todo tiene solución cuando se siguen las pautas adecuadas.
Para líquidos:
- Preparar la dosis en una jeringuilla.
- Colocar al perro con las patas traseras apoyadas de forma tal que no se pueda mover o saltar.
- Usar una mano para mantener la mandíbula del perro cerrada.
- introducir la jeringuilla en el espacio que queda entre los dientes posteriores y la mejilla o bien en algún hueco de la dentadura.
- Verter el contenido de la jeringuilla poco a poco para evitar que se atragante o el vómito.
- Mantener durante todo el proceso la boca del perro cerrada y la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás para favorecer que trague el contenido vertido en su boca.
- Cuando se termine es muy importante premiar al animal con palabras cariñosas y si su dolencia lo permite con alguna golosina.
Para pastillas:
- Preparar la pastilla y sujetarla entre el índice y el pulgar.
- Colocar al perro con las patas traseras apoyadas de forma tal que no se pueda mover o saltar.
- Agarrar con firmeza desde arriba, la mandíbula superior con el pulgar e índice de la otra mano.
- Apretar por detrás de los caninos superiores y ladear la cabeza ligeramente hacia arriba, de esta forma se abrirá la mandíbula inferior.
- Con un dedo de la otra mano bajar aún más la mandíbula inferior e introducir la pastilla en su boca.
- Colocar la pastilla lo más adentro posible de su boca pero sin que tu mano toque la lengua para evitar la náusea.
- Cerrar su boca y mantenerlo así mientras se coloca su cabeza en la posición normal. De este modo podrá tragar con más facilidad.
- Al cabo de un rato retirar la mano. Si el animal se relame es que se ha tragado la pastilla.
Por último para cerrar el artículo queremos dar unas indicaciones específicas para los dueños de lindos gatitos y gatitas.
Con los gatos se pueden seguir los mismos procedimientos arriba indicados, pero debemos dar algunas pautas más:
- Asegúrate de que tu gato tiene las uñas cortadas antes de iniciar las maniobras.
- Puede resultar útil envolverlo con una manta o una toalla grande dejando asomar solo la cabeza pata tenerlo más inmovilizado, al menos las primeras veces, cuando se acostumbre no será necesario.
- Frotar suavemente la garganta le ayudará a tragar el medicamento.
Esperamos que nuestros consejos te hayan resultado útiles, pero si tienes dudas te recomendamos que consultes con el veterinario de tu mascota pidiendo una cita. Por último, recuerda que nunca debes administrar a tu mascota un medicamento por tu cuenta, siempre debes seguir las indicaciones de su veterinario.